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martes, septiembre 20

Encuentros en Perú

Queridos hermanos:

Deseamos contarles un poquito lo que vamos trabajando y viviendo en S.M. Perú.

El martes 9 de agosto tuvimos nuestra reunión "San Rafael" en casa de Carmencita Ortiz. Con Martita, Ivo, Enriqueta, Carmen M., Sara T., Marta, Aida G., Eliana e Ingrid, Tena, Carmen D. y el padre Lucho Morán.

Iniciamos invocando al Espíritu Santo, luego rezamos el evangelio del día "Si no se hacen como niños, no entrarán en el Reino de los cielos". Compartimos la oración bíblica.
Planeamos un poco la agenda de lo que queda del año. El padre Lucho nos acompañará dos veces al mes, incluidas pequeñas jornadas que nos ayudarán en nuestro crecimiento. Parte del plan es trabajar el tema del Encuentro G, y la renovación de las Alianzas...
Tena nos contó un poco de su viaje a Europa. Fue a Lourdes, donde nos contó que se acercó al padre que hizo la misa y le dijo que era de Sudamérica y el padre le cantó La Guadalupana!!!! Tena por supuesto casi muere de la alegría... También estuvo en el Monte St. Michel y el Monasterio De Poblete -entre otros lugares- donde se hizo presente, diciendo que pertenecía a un Movimiento fundado por el Padre Bernardo, la acogieron con mucha alegría. Luego participó también en una Liturgia Oriental.



**El viernes 19 de agosto nos reunimos en el colegio Belén, para tener una tarde de oración, con motivo del E. General. Estuvimos presentes: Nancy, Tita, Lili, Martha, Mary, Alfonso y Aida, Alicia, Tena, Martita, Ivo, Carmen O., María Esther, Queti, Enriqueta, Flor, Juanita, Sara, Carmen M., Eliana e Ingrid Candia, Carmen D. y Padre Lucho.
Iniciamos con la exposición del Santísimo Sacramento, poniendo en el corazón de Jesús a nuestros hermanos que iban a participar del Encuentro y a todos los organizadores y ponentes. Luego rezamos con el evangelio "Amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todo tu ser". Y se compartió la oración espontánea.
Pasamos al salón para la primera ponencia a cargo de Ivo Saric, sobre la Oración Contemplativa desde su experiencia con los monjes Benedictinos.
Ivo muy agradecido con padre Bernardo: "una de las obras de misericordia es enseñar al que no sabe, padre Bernardo nos ha hecho mucho bien con sus cartas con sus enseñanzas y sus escritos".
Luego tuvimos 15 minutos de break y compartir.
La segunda ponencia a cargo de Carmencita Ortiz, nos habló de la búsqueda y hallazgo de Dios, sobre la Desolación y la Consolación.
Al terminar el tema de Carmencita, pasamos a la capilla ante el Señor, para hacer una oración de acción de gracias por el momento que nos regaló en comunión, entregándole nuestras necesidades e intenciones, principalmente el Encuentro, para que los acompañe en estos días, recordando también a nuestros sacerdotes, a todos y cada uno de los miembros de SM, los presentes y ausentes, enfermos, etc.


A los pies del altar la Guadalupana, oyendo e intercediendo por todos nosotros, a quién se le invocó y cantó. Se le agradeció al Señor el regalo de tenerlo con nosotros. Se hizo la reserva del Santísimo y en un clima de fraternidad le cantamos a María.

Unidos en Ella, para Él…

Carmen

LLamados a ser libres...

Te esperamos hoy...

18 hs. en nuestra Sede

un nuevo Encuentro de Oración y contemplación




NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES (5)

NOVENA (Dia 5)

ORACIÓN INICIAL

            Santísima Virgen de la Merced, Madre nuestra y modelo de los que sufren  persecución o dolor por amor y fidelidad a la Iglesia, escucha nuestros humildes ruegos. Te pedimos por la Santa Iglesia, por el Papa Francisco, por nuestros hermanos necesitados de ayuda y consuelo. Sobre todo por aquellos que sufren enfermedad y persecución, que experimenten el consuelo que reservas a quienes perseveran fieles a las enseñanzas de tu hijo Jesucristo.
En este Año de la Misericordia, danos María, ganar un corazón amoroso y generoso para saber perdonar y para trabajar con firmeza y constancia en la construcción de una comunidad renovada en la que vivamos con alegría el servicio mutuo aprendiendo cada día más a amar como Jesús nos amó.
Modelo nuestro, queremos amar a Jesús como vos lo amas.


MARÍA, VIRGEN DE LA caridad


   ...ella misma nos había dicho: “Yo soy... modelo vivo y perfecto que invito a la fe, caridad y comunión con Dios”. Y cuando yo les pregunté a ustedes: “¿de qué nos es modelo y hacia dónde nos atrae María?”, recuerdo que la respuesta fue unánime y espontánea: ¡modelo de contemplación en su soledad solidaria! (B.Olivera. en Siguiendo a Jesús en María)


          Amar es dar. Es dar el tiempo que nosotros necesitamos; es dar nuestra salud; dar nuestros talentos; es darnos; es dar al Dios que habita en nosotros. Amar es darlo todo y maría lo dio todo; se dio a sí misma. Dio su cuerpo para que en Él, Dios se encarnara. Dio su vida para que en ella, Dios obrara maravillas. Dio a su Hijo amantísimo, el fruto de sus entrañas. Dio su tiempo; dio su afecto; dio su alegría. Lo dio todo sin guardarse nada. Lo dio todo para tenerlo todo en Dios.
          Amar es dar y María dio y María amó. Amó en el silencio; amó en la oración; amó en la contemplación; amó en el servicio. Amó a Dios y amó a su prójimo. Amó hasta el extremo; amó como Jesús, hasta el sacrificio.
          Y hoy, sigue amando. Por eso la llamamos Madre del Amor Hermosos. Sigue cuidando y compadeciéndose de sus hijos; sigue dando a los hombres el don precioso de la libertad para que tengan fe; por eso la llamamos Virgen Madre de la Merced. Hoy sigue amando y su amor es ejemplo para nuestro amor. Su amor es voz que dice que amar es darse plenamente; es dar la vida por la libertad y la fe del hermano; es dar la mayor riqueza que poseemos: Cristo Jesús, Redentor del mundo, para que los demás crean en El y creyendo se salven.
            Amar es darse; como Jesús; como maría, la Virgen de la caridad ardiente.

PAUTAS PARA LA REFLEXIÓN

            ¿Qué te enseña María con su amor? ¿A través de qué hoy María te muestra su amor? ¿Piensa qué dio María y qué puedes dar tú? ¿cómo es mi respuesta solidaria?

Presentamos nuestra petición personal y rezamos tres Ave Marías

ORACIÓN FINAL

"Acuérdate, piadosísima Virgen María, que jamás se oyó decir, que ninguno de los que han acudido a tu presencia, implorando tu asistencia y reclamando tu socorro, ha sido abandonado de vos.
Animados por esta confianza, a vos también acudimos Oh ¡Virgen, Madre de las vírgenes! y aún gimiendo por el peso de nuestros pecados, nos animamos a comparecer ante tu presencia soberana. Oh. Madre de Dios, no deseches nuestras súplicas sino más bien escúchalas y acógelas favorablemente, por Jesucristo Nuestro Señor. Amen." 

lunes, septiembre 19

NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES (4)

NOVENA (Dia 3)

ORACIÓN INICIAL

            Santísima Virgen de la Merced, Madre nuestra y modelo de los que sufren  persecución o dolor por amor y fidelidad a la Iglesia, escucha nuestros humildes ruegos. Te pedimos por la Santa Iglesia, por el Papa Francisco, por nuestros hermanos necesitados de ayuda y consuelo. Sobre todo por aquellos que sufren enfermedad y persecución, que experimenten el consuelo que reservas a quienes perseveran fieles a las enseñanzas de tu hijo Jesucristo.
En este Año de la Misericordia, danos María, ganar un corazón amoroso y generoso para saber perdonar y para trabajar con firmeza y constancia en la construcción de una comunidad renovada en la que vivamos con alegría el servicio mutuo aprendiendo cada día más a amar como Jesús nos amó.
Modelo nuestro, queremos amar a Jesús como vos lo amas.


María, virgen de la esperanza

       María tuvo que pasar muchos años de su vida en la obscuridad de lo cotidiano con la esperanza puesta en el anuncio y la promesa. Sólo recibió un signo para guiar sus pasos: un signo de contradicción. La espada de la palabra de su hijo atravesó repetidamente su alma para que pudiera pasar de una maternidad natural a otra en el Espíritu. Por todo esto, ayer y siempre, la proclamamos bienaventurada por haber creído. (B.Olivera. en Siguiendo a Jesús en María...)

            Cuando el Dios de la promesa se había vuelto silencio para Isabel, maría esperaba; esperaba en la oración, esperaba recordando la promesa, con la esperanza cierta de que se cumpliría porque Dios, que es fiel, no abandona a los que lo aman.
            Esta esperanza se volvió compromiso en la Anunciación, cuando Dios la visitó para hacerla fecunda; María creyó porque esperaba.
            Es la misma esperanza que la sostuvo pie junto a la cruz, porque sabía que allí no terminaba todo, que Jesús resucitaría.
            María esperó contra toda esperanza. Esperó, en medio de un pueblo dominado, la liberación definitiva. Esperó frente a la muerte de su Hijo la vida para siempre. Esperó en medio del color y la pobreza; en la angustia y el silencio. Pero su espera no fue de brazos cruzados. Esperó orando; esperó comprometiéndose; esperó sirviendo, amando, esperó caminando junto a Jesús hacia el calvario; esperó buscando la patria verdadera; esperó con la lámpara encendida; esperó alerta, como espera el centinela.
            Por eso hoy, en medio de un mundo que sufre, María nos invita a la esperanza. En medio del dolor, la violencia, el hambre y la pobreza, la enfermedad y la muerte, María nos habla de esperanza, y su palabra suena sincera porque ella conoció todo esto y esperó con alegría. Ella nos dice que todas estas realidades no son definitivas, a pesar de todo, vivir alegres, trabajar por un orden nuevo y no perder nunca la esperanza, porque Cristo ha resucitado, ha vencido al mundo dándonos vida y vida para siempre.
            María fue llevada al cielo y con su Asunción nos llama a la esperanza. Como ella. Nosotros llegaremos un día junto al Padre. Mientras tanto, caminaremos son instalarnos, sin aferrarnos a los bienes materiales, a los valores de este mundo, sino que libres, como María, peregrinemos llenos de esperanza.

PAUTAS PARA LA REFLEXIÓN

       ¿Qué momentos de la vida de María te habla de esperanza? ¿Qué te enseña María con su esperanza? ¿En éste mundo de hoy tan problemático, qué te dice Maria con su esperanza?

Presentamos nuestra petición personal y rezamos tres avemarías

ORACIÓN FINAL

"Acuérdate, piadosísima Virgen María, que jamás se oyó decir, que ninguno de los que han acudido a tu presencia, implorando tu asistencia y reclamando tu socorro, ha sido abandonado de vos.
Animados por esta confianza, a vos también acudimos Oh ¡Virgen, Madre de las vírgenes! y aún gimiendo por el peso de nuestros pecados, nos animamos a comparecer ante tu presencia soberana. Oh. Madre de Dios, no deseches nuestras súplicas sino más bien escúchalas y acógelas favorablemente, por Jesucristo Nuestro Señor. Amen." 


domingo, septiembre 18

Compartir Misión de invierno Río Villegas

Muy querida Familia de SM

Con algunas fotos, testimonios y experiencias les compartimos algo de lo vivido en la Misión de Invierno del Paraje de Río Villegas (Diócesis de Bariloche).

Cada misión es un Milagro de Dios. Como nos enseñó Bernardo, "Dios trabaja y nosotros sudamos". Sudamos en comunión y sostenidos por sus oraciones y bajo la mano providente del Padre Dios. La misión es una "salida" de sí mismos. Eso es lo que vamos viviendo y experienciando todos: "ejercitándonos en el amor fraterno" que hace "comunión misionera". Y así compartimos lo que somos: marianos y contemplativos al servicio de todos.

Villegas es un paraje atravesado por una soledad intensa: por el paisaje, por la cultura, por las historias, por la realidad social y también eclesial. La presencia, la sola presencia: ya es "evangelio": Buena Noticia que trae la salvación, que implica conversión (de todos!) y camino de fe. En medio de las situaciones dolorosas y deshumanizadas allí hay una pequeña llama de fe… y anhelos de esperanza.

La vida cotidiana en la misión estuvo entramada de: oración personal con la Palabra, en el camino… oración comunitaria, visitas a todas la casas del Paraje y alrededores, encuentros con niños, adolescentes y mujeres, celebraciones de la Palabra, escucha, diálogo, fragilidad y misericordia fraternas, Adoración eucarística cada mañana, juegos, dramatizaciones, videos, y música, alegría y confianza, soledades y mesas compartidas…catequesis y una alianza con Dios en María (de Adriana, señora del paraje) 
Les quiero acercar algunas experiencias y testimonios de lo vivido allí. Y finalmente algunas "palabras de aliento" del obispo de Bariloche, Padre Juan José. Mensajes que nos enviábamos. Ya les compartimos algunas de sus palabras en una publicación de julio.



 De María Nougués (SM Región Centro)

La misión de invierno fue un regalo más de Dios y la Virgen para mi corazón. Fuimos una pequeña comunidad de seis misioneros que pusimos todo de nuestra parte para aprovechar cada momento de la justa semana en la que estuvimos. Y así resultó ser, una semana intensa llena de vidas y Vida! Encuentros personales y comunitarios. Juegos, oraciones y entregas, compartidas entrañables y tanto más que se fueron dando en el transcurrir del tiempo.

Doy Gracias a Dios y María de san José, porque en este quinto año de visita misionera invernal, recibimos más confianza y amistad, más transparencia y participación, más encuentros de confiada hondura. De entre las tantas riquezas vividas, pudimos concretar el espacio de los juegos entre todos, creyentes y no tantos, invitados ¡todos! con obispo incluido como uno más. Un nuevo y renovador modo de encontrarnos que evidentemente nos desafía a no perderlo e ir sumando creatividad, para lograr seguir disfrutando con ellos en esta alegría de compartir.
Nuestro mensaje sí está claro, ofrecer nuestra profunda Alegría, ¡la que nos da Jesús en María de San José!


De Tere Páez (SM Región Neuquén)
Taller "Orarte"
Bajo el amparo de la Virgen de Lujan, nos propusimos trabajar durante cuatro encuentros. El objetivo fue compartir un


momento de formación, de oración, sellando el encuentro con una labor. Rezamos y dejamos volar nuestra creatividad. Cada

día tuvo su propio gesto recreando la situación del negrito Manuel quien con tanto amor, ternura y dedicación preparó el altarcito para la Virgen. Y así compartimos con diez mujeres de las cuales una de ellas, Adriana, hizo la Alianza de amor con Dios en María, sellando su fidelidad a Ella, como dijera nuestro querido Manuel, "SOY DE LA VIRGEN NOMAS".

Si bien cada artesanía que hicieron las mujeres el destino final era armar o adornar su propio altarcito hogareño, como signo de encuentro comunitario se armaron moños celestes y blancos para todas las familias que se entregaron el día de la fiesta comunitaria, en honor al bicentenario de la Patria.  Los encuentros fueron espacios de vida compartida y presencia de Dios y María en la vida de cada una de nosotras.




De Martín (Mono) Cecchi, SM Norte.
 
Muy difícil definir una gracia, "porque son muchas", pero a fin de contestar tu pregunta, diría que "LA GRACIA", la encuentro en cada nuevo rostro, que me presenta Jesús, en cada Misión, y cuando digo un nuevo rostro, no me refiero a un nuevo vecino del paraje, sino, a un rostro que se me presenta de una manera distinta al de la visita anterior, una nueva situación, una nueva necesidad, etc. y esto se da tanto con los "misionados como con los misioneros".







Finalmente. La misión es siempre eclesial: esta Familia de Fe, Esperanza y Caridad, que es más grande que nuestra pequeña comunidad, que es Madre y Maestra, Familia y Pueblo de Dios. Y la vivimos en la solidaridad y cuidado de una consagrada, de dos laicos de Bariloche (Herman Lectio y Marcelo Murúa), la vista del Padre Pepe Lynch y del Padre Obispo. Él vino a compartir toda una tarde con nosotros, como relató María, en la tarde de la "amistad y encuentro". Participaron casi cuarenta personas (de las 200 aprox que habitan el paraje) se animaron en medio de la lluvia y el intenso frío a jugar, encontrarse y celebrar la vida (había tanto católicos como evangélicos).  Cuando el obispo se estaba yendo nos pidió continuar en esta misión. ¿Recuerdan lo que nos escribió el Obispo en julio antes de partir?

Muchas gracias por este esfuerzo misionero evangelizador de tu comunidad. Siempre le digo a todos que una visita de dos días a un lugar durante el cual se ora se vive y comparte ya es evangelizador por sí mismo...Es buena noticia! y esto es lo principal siempre. Que la gente, que cada uno/a se sienta visitado, saludado, tenido en cuenta por alguien que lo hace libremente, gratuitamente, generosamente, humildemente...Por supuesto, teniendo esto como columna, lindo todo lo que se pueda hacer por alentar la fe, tejer lazos (entre Uds y ellos, y entre ellos) despertar iniciativas (cosa no fácil en el sur...), suscitar líderes...En la vida son muy importantes las relaciones personales aunque siempre abriendo campo a la gran Iglesia de la cual somos parte (para no quedar en lo individual solamente). 
En fin. Son pensamientos compartidos en voz alta. Me llegaré en algún momento, Dios mediante. Un gran abrazo y mi saludo para todos.

Cuando lo saludamos para su cumpleaños y aniversario de la Diócesis, el mismo día que finalizaba la misión, nos respondió en un mensaje:

Abrazo y gracias por acompañarme y acompañarnos. El Reino es una hermosa fiesta donde niños y grandes, conocidos y extraños, juegan en paz y alegría, sin violencias ni odios, comparten un pan o una torta frita...donde el tiempo se llena de eternidad...y la vida es plena! Abrazo. [22/7/2016]



La vuelta fue larga, lo suficiente para volver a experimentar el cuidado de Dios, y agradecer y cantar el Magníficat!! Gracias porque nos sentimos acompañados por todos en SM con su oración, solidaridad y cercanía.


 (Mono Cecchi – Lucía Canullo – Graciela Cañas - María Nougués – Tere Páez – Adrián Gauna)
Comunidad Misionera Sta. María del Encuentro  

NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES (3)

NOVENA (Dia 3)

ORACIÓN INICIAL

            Santísima Virgen de la Merced, Madre nuestra y modelo de los que sufren  persecución o dolor por amor y fidelidad a la Iglesia, escucha nuestros humildes ruegos. Te pedimos por la Santa Iglesia, por el Papa Francisco, por nuestros hermanos necesitados de ayuda y consuelo. Sobre todo por aquellos que sufren enfermedad y persecución, que experimenten el consuelo que reservas a quienes perseveran fieles a las enseñanzas de tu hijo Jesucristo.
En este Año de la Misericordia, danos María, ganar un corazón amoroso y generoso para saber perdonar y para trabajar con firmeza y constancia en la construcción de una comunidad renovada en la que vivamos con alegría el servicio mutuo aprendiendo cada día más a amar como Jesús nos amó.
Modelo nuestro, queremos amar a Jesús como vos lo amas.



MARÍA, MAESTRA EN LA FE


       Ya les dije que la primera comunidad cristiana al acoger a María en su seno encontró en ella la más pura transparencia del evangelio. Más concretamente, la contempló como la más perfecta discípula y, por lo mismo, como la más acabada de las creyentes. (B. Olivera. En Siguiendo a Jesús en Maria...)

         Uno de los mayores problemas del cristiano de hoy es la separación que hace entre fe y vida. De allí resulta la falta de testimonio y compromiso que tanto nos reprochan los hombres de nuestro tiempo.
       En María, estos dos puntos se tocan. Ella es capaz de integrar la fe con la vida, por eso es reconocida en la Iglesia como modelo extraordinario en la fe.
         Por la fe, María abre su interior a la Palabra de Dios, la acoge y deja que la fuerza dinamizadora de esta palabra obre en ella. María confía fuertemente en Dios que le habla; y porque confía es capaz de responder afirmativamente en la Anunciación, engendrando así por su fe y obediencia al mismo Hijo del Padre. “Lo atado por Eva con su incredulidad, fue desatado por maría mediante la fe”.
        La fe de maría es fe probada en la persecución, la huída y el exilio. Es fe grande, es fe fuerte. Es fe que la impulsa a subir al calvario donde la obra de la redención alcanza su culminación; donde Cristo se ofrece a Dios para la salvación de todos; y donde maría, sufriendo profundamente con su Hijo, se asocia al sacrificio de la cruz.
       Por su fe, María es la virgen fiel en quien se cumple la bienaventuranza mayor; “feliz tú que has creído”.
        La fe de María es fe decidida. Es fe que pone a los hombres al servicio de Jesús, diciéndoles: “Haced lo que Él os diga”. Es fe que suscita la fe en los demás, como en Caná donde los apóstoles “creyeron en Él” a través del milagro propiciado por María.
       María es y será nuestro modelo en la fe; nuestra maestra en la fe, porque ella escuchó la palabra de Dios, creyó en ella y la puso en práctica. Ella nos enseña cómo vivir la fe, cómo hacer de la fe vida. Ella nos enseña a confiar más allá de toda duda, de todo dolor, en el amor misericordioso de Dios. Ella conoce el profundo valor de la fe; la riqueza que es ésta para el hombre; por eso la defiende y la protege en el que está a punto de perderla, y nos enseña a nosotros a hacer lo mismo.

PAUTAS PARA LA REFLEXIÓN

      ¿Por qué decimos que María es nuestro modelo en la fe? ¿Qué es lo que más te llama la atención de la fe de María? ¿Integras fe y vida o las separas como si fueran dos realidades incompatibles?

Presentamos nuestra petición personal y rezamos tres avemarías

ORACIÓN FINAL

"Acuérdate, piadosísima Virgen María, que jamás se oyó decir, que ninguno de los que han acudido a tu presencia, implorando tu asistencia y reclamando tu socorro, ha sido abandonado de vos.
Animados por esta confianza, a vos también acudimos Oh ¡Virgen, Madre de las vírgenes! y aún gimiendo por el peso de nuestros pecados, nos animamos a comparecer ante tu presencia soberana. Oh. Madre de Dios, no deseches nuestras súplicas sino más bien escúchalas y acógelas favorablemente, por Jesucristo Nuestro Señor. Amen." 






sábado, septiembre 17

NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES (2)

NOVENA (Dia 2)




ORACIÓN INICIAL


            Santísima Virgen de la Merced, Madre nuestra y modelo de los que sufren  persecución o dolor por amor y fidelidad a la Iglesia, escucha nuestros humildes ruegos. Te pedimos por la Santa Iglesia, por el Papa Francisco, por nuestros hermanos necesitados de ayuda y consuelo. Sobre todo por aquellos que sufren enfermedad y persecución, que experimenten el consuelo que reservas a quienes perseveran fieles a las enseñanzas de tu hijo Jesucristo.
En este Año de la Misericordia, danos María, ganar un corazón amoroso y generoso para saber perdonar y para trabajar con firmeza y constancia en la construcción de una comunidad renovada en la que vivamos con alegría el servicio mutuo aprendiendo cada día más a amar como Jesús nos amó.
Modelo nuestro, queremos amar a Jesús como vos lo amas.



MARÍA, MADRE DE LA REDENCIÓN


       El día del calvario María creyó en la muerte redentora de su hijo y en su resurrección como regreso a la casa del Padre. Creyó también, cuando todo parecía perdido, en la extensión de su maternidad como don de su hijo hacia los hombres. Su fe no vaciló, se mantuvo firme como sobre una roca; aún más, creció mediante el más hondo despojo y abatimiento que jamás haya experimentado creatura alguna. El día del calvario, María aprendió como nunca la sabiduría de Dios que reside en Cristo Crucificado. (B.Olivera. en Siguiendo a Jesús en María...)

            El hombre no puede vivir sin amor. Sin amor no se comprende a sí mismo; su vida no tiene sentido sin amor. Por eso el amor de Dios se hizo presente, se encarnó, fue revelado a los hombreasen Cristo a través del ministerio de la Redención.
            María participa en este ministerio. Ella no es sólo el fruto admirable de la redención, sino que es también cooperadora activa en esta obra; convirtiéndose así en protagonista de la historia.
            María es aquella virgen de quien dijo el profeta Isaías: “dará a luz un hijo y le pondrá por nombre Emmanuel”, que traducido significa “Dios – con – nosotros”, María colabora en la redención porque ha sido anunciada como Madre del Mesías esperado por Israel, el que redimiría a su pueblo de todos los pecados.
            María es aquella que al dar con toda libertad su SI en la Anunciación, posibilitó que el amor de Dios se encarnara y se revelara a los hombres en Jesús de Nazaret. María colabora en la redención porque es Madre del Cristo, el redentor del mundo; porque a  través de ella, Cristo Jesús se unió a todo hombre.
            María es aquella que nos fue entregada en el calvario por Madre. María colabora en la redención porque como madre de los redimidos, cuida de sus hijos, privilegiando a los que sufren el dolor de la pobreza, la persecución, la cautividad, la opresión.
            María es aquella a quien llamamos Santa maría de la Redención de los cautivos. María colabora en la recensión, por eso no se olvidó de sus hijos en cautividad, aquellos que se encontraban en poder de los enemigos del evangelio.
            María es aquella que nos sigue mostrando a su Hijo, -camino, verdad y vida-. María colabora en la redención porque hace posible que los hombres se comprendan a sí mismos, y vivan una vida con sentido, al acercarlos a Cristo Redentor.

PAUTAS PARA LA REFLEXIÓN

            ¿De qué manera pienso que María colaboró en la redención? ¿Creo que imitando a María estoy colaborando con Jesús en el Plan de Salvación? ¿Me preocupo como maría de aquellos que sufren, que son perseguidos, de los oprimidos y los que se encuentran en cautividad? ¿Pienso qué puedo hacer por los más necesitados?


Presentamos nuestra petición personal y rezamos tres Ave Marías

ORACIÓN FINAL

"Acuérdate, piadosísima Virgen María, que jamás se oyó decir, que ninguno de los que han acudido a tu presencia, implorando tu asistencia y reclamando tu socorro, ha sido abandonado de vos.
Animados por esta confianza, a vos también acudimos Oh ¡Virgen, Madre de las vírgenes! y aún gimiendo por el peso de nuestros pecados, nos animamos a comparecer ante tu presencia soberana. Oh. Madre de Dios, no deseches nuestras súplicas sino más bien escúchalas y acógelas favorablemente, por Jesucristo Nuestro Señor. Amen." 






viernes, septiembre 16

NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES (1)


NOVENA (Dia 1)




ORACIÓN INICIAL


            Santísima Virgen de la Merced, Madre nuestra y modelo de los que sufren  persecución o dolor por amor y fidelidad a la Iglesia, escucha nuestros humildes ruegos. Te pedimos por la Santa Iglesia, por el Papa Francisco, por nuestros hermanos necesitados de ayuda y consuelo. Sobre todo por aquellos que sufren enfermedad y persecución, que experimenten el consuelo que reservas a quienes perseveran fieles a las enseñanzas de tu hijo Jesucristo.
En este Año de la Misericordia, danos María, ganar un corazón amoroso y generoso para saber perdonar y para trabajar con firmeza y constancia en la construcción de una comunidad renovada en la que vivamos con alegría el servicio mutuo aprendiendo cada día más a amar como Jesús nos amó.
Modelo nuestro, queremos amar a Jesús como vos lo amas.



SANTA MARÍA DE LA MERCED O DE LA MISERICORDIA

...Imitar a María es internalizar o hacer propios los valores o bienes que motivaron la vida de María: fe, esperanza, caridad, oración, disponibilidad, libertad, gratuidad, entrega, compromiso, servicio...

       Ya sabemos que los valores son bienes atrayentes que motivan o guían nuestro obrar. En el caso de nuestra Madre inmaculada podemos agregar algo más: ¡ella misma, sumo bien y bondad, es un valor! Por eso su persona y presencia tiene importancia, influencia y “arrastre” en nuestras vidas. Por eso guía nuestra acciones, inspira nuestra conducta y configura nuestra personalidad. (B.Olivera, en Siguiendo a Jesús en Maria...)

            En el rostro de María de la Merced hay un algo especial que, al contemplarla, no puede dejar de llamar nuestra atención. Ese algo es la ternura entrañable que se refleja en su mirada y en el gesto de sus manos abiertas en señal de don o de acogida. María es ternura y por eso, nadie mejor que ella, puede mostrar a los hombres la misericordia infinita de Dios.
            Sí, la ternura de María manifiesta la misericordia de Dios. ¿Por qué? Sencillamente porque la misericordia es la ternura que anida en un corazón y lo desborda experimentándose en forma de compasión, perdón o ayuda hacia otros.
            Esta es la experiencia que Israel tiene de Dios, la de un Padre lleno de ternura., rico en misericordia, que no cesa de salir en socorro del miserable y del afligido, del huérfano y la viuda; que no deja sin respuesta el clamor de su pueblo oprimido en Egipto; que perdona las infidelidades de Israel mostrando así su ternura y amor generoso; que no busca la muerte del pecador sino que cambie de conducta y viva.
            Esta es la experiencia que nosotros tenemos de Dios, la del Dios del amor misericordioso, que no dudó en enviarnos a su Hijo, quien sufrió la muerte y muerte de cruz para que nosotros tuviéramos vida para siempre.
            Y esta es la experiencia que tenemos de María: la de la mujer misericordiosa que con ternura maternal va en ayuda de sus hijos más pequeños, aquellos que sufren, aquellos que lloran. Y María de la Merced nos habla de ese aspecto de maría: su misericordia; pero más precisamente de su misericordia redentora porque vista, consuela y libera. María de la Merced hace presente entre los hombres la misericordia de Dios consolando al perseguido, redimiendo al que sufre opresión, al que está en cautividad; situaciones estas que ponen al hombre en peligro de perder el don precioso de la fe, a la vez que niegan su dignidad.

PAUTAS PARA LA REFLEXIÓN

            ¿Qué relación hay entre misericordia y ternura? ¿Por qué María nos muestra la misericordia de Dios? ¿Por qué María de la Merced es Madre de la Misericordia? ¿Soy yo misericordioso? ¿Cómo imito a María?


Presentamos nuestra petición personal y rezamos tres Ave Marías

ORACIÓN FINAL

"Acuérdate, piadosísima Virgen María, que jamás se oyó decir, que ninguno de los que han acudido a tu presencia, implorando tu asistencia y reclamando tu socorro, haya sido abandonado por vos.
Animados por esta confianza, a vos también acudimos nosotros, Oh ¡Virgen, Madre de las vírgenes! y aún gimiendo por el peso de nuestros pecados, nos animamos a comparecer ante tu presencia soberana. Oh. Madre de Dios, no deseches nuestras súplicas sino más bien escúchalas y acógelas favorablemente, por Jesucristo Nuestro Señor. Amen." 





martes, septiembre 13

A Su imagen y semejanza...

Te esperamos hoy...

18 hs. en nuestra Sede

un nuevo Encuentro de Oración y contemplación





Eucaristía en nuestra Casa

¡Recuerden!

Invitemos a nuestros familiares y amigos a compartir con nosotros la Misa que el Padre Martín Serantes celebrará en nuestra Sede, el próximo jueves 15 de septiembre,  a las 19 hs.




Sede del Movimiento “Soledad Mariana”

Teléfono: 4824-6318



Movimiento Soledad Mariana

"Soledad Mariana" es un Movimiento de espiritualidad mariana y contemplativa, fundado en la Argentina en 1973, por el monje trapense Bernardo Olivera, actual Abad del Monasterio Nuestra Señora de los Ángeles de Azul, provincia de Buenos Aires.