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miércoles, diciembre 7

Día 7: Nuestra Señora de los Dolores

Historia
Esta advocación recuerda los dolores que sufrió la Madre de Jesús, sobre todo el día de la Pasión y muerte de su Hijo, dolores que fueron profetizados por el anciano Simeón, cuando en el templo de Jerusalén dijo a María que una espada le traspasaría el corazón ( Lc 2, 32-35). La piedad ha representado a la Virgen Dolorosa con un corazón traspasado por siete espadas que simbolizan otros tantos dolores de María, y hasta hace pocos años esta conmemoración se denominaba "Los siete dolores de la Virgen María".
El origen de la devoción a la virgen de los dolores se remonta al XIV. La Virgen le dijo a santa Brígida: "Miro ahora a todos los que viven en el mundo por ver si hay quien se compadezca de mi y medite mi dolor, mas hallo poquísimos que piensen en mi tribulación y padecimientos. Y así, tú, hija, no me olvides, aunque soy olvidada y menospreciada de muchos, mira mi dolor e imítame en lo que pudieres. Considera mis angustias y lágrimas, y duélete de que sean pocos los amigos de Dios".

Lectura: Jn 19, 25-27
"Junto a la cruz de Jesús estaban su madre, la hermana de su madre, María, la mujer de Cleofás, y María Magdalena. Jesús, al ver a su madre y junto a ella al discípulo a quien tanto amaba, dijo a su madre: –Mujer, ahí tienes a tu hijo. Y después dijo al discípulo: –Ahí tienes a tu madre. Y desde aquel momento, el discípulo la recibió como suya".

Reflexión
En los momentos de su agonía, cuando ya no le quedaban fuerzas ni aire para respirar, Jesús nos entrega su último testamento: su madre, para que siempre nos experimentemos hijos queridos de Dios.
Dios pudo hacer que nosotros naciéramos de otra manera, pero quiso que cada uno tuviera una madre y la necesidad de recibir cariño maternal. Hemos sido hechos para vivir en familia con padre, madre y hermanos. Es allí donde experimentamos la seguridad física y emocional, el don del amor gratuito, ser amados incondicionalmente por lo que somos y no por lo que hacemos.
Vivir ese sentimiento de gratuidad es lo que regala la mayor seguridad ante todo temor y angustia. Desde esta experiencia de saberse generosamente amados nace la fuerza del amor cristiano.

Oración
Señora y Madre nuestra: tu estabas serena y fuerte junto a la cruz de Jesús. Ofrecías tu Hijo al Padre para la redención del mundo.
Lo perdías, en cierto sentido, porque El tenía que estar en las cosas del Padre, pero lo ganabas porque se convertía en Redentor del mundo, en el Amigo que da la vida por sus amigos.
María, ¡qué hermoso es escuchar desde la cruz las palabras de Jesús: "Ahí tienes a tu hijo", "ahí tienes a tu Madre".
¡Qué bueno si te recibimos en nuestra casa como Juan! Queremos llevarte siempre a nuestra casa.
Nuestra casa es el lugar donde vivimos. Pero nuestra casa es sobre todo el corazón, donde mora la Trinidad Santísima. Amén.

Movimiento Soledad Mariana

"Soledad Mariana" es un Movimiento de espiritualidad mariana y contemplativa, fundado en la Argentina en 1973, por el monje trapense Bernardo Olivera, actual Abad del Monasterio Nuestra Señora de los Ángeles de Azul, provincia de Buenos Aires.