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viernes, marzo 22

Francisco, uno más entre basureros y jardineros


En otro gesto de humildad, el Papa participó de una misa para los empleados

y trabajadores de la Plaza San Pedro


El Papa Francisco celebró hoy misa en Santa Marta con recolectores de basura y jardineros, que normalmente trabajan en la plaza San Pedro.

Según informó el vocero del Vaticano, Federico Lombardi, durante la celebración del jueves estuvieron presentes los empleados del mismo Domus de Santa Marta, edificio adyacente a la Basílica de San Pedro.

"El Papa -relató el vocero- ofreció un breve pensamiento muy bello: si nosotros tenemos el corazón cerrado, si tenemos el corazón de piedra, las piedras llegan entre las manos y estamos listos a lanzarlas" y por ello es necesario abrir el corazón al amor.

Además, el Vaticano ha anunciado que Francisco ha decidido llevar a cabo los oficios del Jueves Santo en el reformatorio de menores de Casal del Marmo, en las afueras de Roma. Allí, siguiendo el rito, el papa lavará los pies de 12 menores recluidos en ese centro. 

Desde que fue elegido por el cónclave papal, Francisco ha tenido una serie de gestos que han sorprendido a los católicos en todo el mundo. Además de los gestos de humildad, el papa ha insistido en que quiere "una iglesia pobre y para los pobres".


Otro guiño de Francisco


El Papa Francisco recibió ayer en el Vaticano a representantes de las iglesias cristianas y de otras religiones, a los que prometió «respeto y amistad» y advirtió sobre los peligros de reducir al hombre «a lo que produce y consume». El encuentro se celebró en la imponente sala Clementina del palacio apostólico y participaron representantes de otras religiones, entre ellos el patriarca ortodoxo Bartolomeo I, quien asistió la víspera en la plaza de San Pedro a la misa de inauguración del pontificado. Se trataba de la primera vez desde el año 1054, cuando se produjo el cisma entre Oriente y Occidente, que el patriarca de Constantinopla asistía a la llamada entronización de un Papa.
Durante su primer día como Pontífice, el Papa latinoamericano cumplió una agenda apretada, que sufrió varios minutos de retraso, algo inusual para el puntual protocolo del Vaticano. «La Iglesia católica es consciente de la importancia de la amistad y del respeto entre hombres y mujeres de diferentes tradiciones religiosas», declaró el Papa ante los líderes cristianos así como ortodoxos, protestantes y judíos presentes. En su discurso, el Papa pidió a los líderes religiosos «que no prevalga una visión humana que reduce al hombre a lo que produce y a lo que consume», dijo.
«Es uno de los peligros de nuestro tiempo», reconoció Francisco, que cuando ejercía como arzobispo de Buenos Aires criticó en varias ocasiones las consecuencias de la globalización. «Tenemos que estar cerca a los hombres y a las mujeres que si bien no se reconocen en las tradiciones religiosas buscan la verdad, la bondad y la belleza, que a su vez son la verdad, la bondad y la belleza de Dios», agregó. A la delegación judía, compuesta por 16 personas, el Papa subrayó el «lazo particular» que une a cristianos y judíos. «Aprecio vuestra presencia y la voluntad que muestran de cooperar por el bien de la humanidad», aseguró tras recalcar la importancia de «la convivencia pacífica entre las religiones». Más de 130 delegaciones de países, entre ellos varios jefes de Estado y líderes religiosos asistieron el martes a la misa de inauguración en San Pedro del pontificado del primer papa jesuita y latinoamericano de la Historia. Francisco recibió ayer al líder del Congreso Judío de América Latina, Claudio Epelman.
La elección del argentino Jorge Bergoglio como nuevo Papa ha generado satisfacción en la comunidad judía de Argentina, la mayor de América Latina, que destacó el lunes pasado las buenas relaciones y el diálogo abierto que el nuevo líder de la Iglesia católica mantuvo como cardenal. Entre los primeros gestos realizados por el Papa figura la decisión de enviar una carta al rabino jefe de Roma en la que desea «poder contribuir al progreso de las relaciones entre judíos y católicos conocidas a partir del Concilio Vaticano II, en un espíritu de colaboración renovada».
Viaje a Tierra Santa
El patriarca ortodoxo de Constantinopla, Bartolomeo I, también tuvo su particular gesto. Invitó ayer Francisco a celebrar en el 2014 juntos un viaje a Tierra Santa en honor de los pioneros del diálogo entre católicos y ortodoxos, informó la agencia de noticias religiosa Asianews. Con ese viaje, los dos líderes religiosos entienden rendir homenaje al histórico encuentro en enero de 1964 en Jerusalén entre Pablo VI y el patriarca Atenágoras, símbolo de la reconciliación entre la Iglesia católica y las Iglesias ortodoxas.
Bartolomeo I fue el único líder que tomó la palabra durante la audiencia general concedida a delegaciones de 33 iglesias cristianas y de otras religiones, entre ellas judíos, protestantes y musulmanes. El patriarca subrayó que es necesario dar testimonio cristiano a través de la «unidad de la Iglesia» para encarar la crisis económica mundial y «las tendencias mundanas».

Movimiento Soledad Mariana

"Soledad Mariana" es un Movimiento de espiritualidad mariana y contemplativa, fundado en la Argentina en 1973, por el monje trapense Bernardo Olivera, actual Abad del Monasterio Nuestra Señora de los Ángeles de Azul, provincia de Buenos Aires.