Querida familia de Soledad Mariana:
Con ¡alegría y esperanza! una pequeña porción de la comunidad misionera, desde el sábado 26 de julio hasta el 2 de agosto estaremos en Río Villegas, diócesis de Bariloche, haciendo la visita misionera al paraje.
Es nuestra cuarta visita de invierno y estamos ¡muy agradecidos a Dios de poder concretarla!
El lema para esta semana es "Amigos, con María estoy entre ustedes".
Esta vez, de la partida seremos Mariana, el Mono, María y ¡Tere Paez! que desde Neuquén nos acompañará unos tres días.
Nuestros deseos para esta visita ¡son muchos! y teniendo en cuenta nuestra pequeñez… confiamos poder cumplir los más posibles.
Deseamos realizar muchas visitas, ya que en invierno encontramos a la mayoría en sus casas. También ofreceremos continuar con la catequesis de niños. Intentaremos lograr otra reunión de oración con las señoras, como lo venimos haciendo en las últimas visitas.
Buscaremos a los jóvenes que estén para compartir con ellos un rato de videos y empanadas… Y también…, dándonos cuenta que la fiesta de "Santa María de los Ángeles" es el 2 de agosto, y, que esta es la advocación de la capilla del paraje, vamos con la propuesta de comenzar a incluir en el paraje la alegría de la ¡Fiesta Patronal! Por lo que llevamos en el corazón la "historia de su patrona" más la Alegría de la Fiesta.
El padre Pepe Parodi, sacerdote que nos acompaña a partir de este año, felizmente podrá estar con nosotros durante tres días. Nos pusimos en contacto también con el obispo Juan José, quien se puso muy contento al saber de nuestra visita.
Está todo puesto entonces en nuestra Amada e Inmaculada Santa María de los
Ángeles, confiando que Ella nos guiará en cada paso y animará en la entrega.
¡Por supuesto que contamos, nos confiamos y apoyamos en la valiosa oración intercesora de cada uno de ustedes!, sabiendo que como Ella y san José, nos hacemos Uno, unidos en el "Cara a Cara con Dios y en el Codo a Codo con ellos"
Va nuestro fraternísimo y agradecido abrazo con un ¡hasta la vuelta!
Mariana, Mono, Tere y María
Pero el Señor en esos días hace horas extras, y nos manda a estos dos Ángeles que nos protegen, San Constancio y Santa Chichita. Inmediatamente nos instalaron una pileta de cocina, (precaria pero útil), nos tiraron un cable especial para que no saltara la llave térmica, nos proveyeron de leña constantemente, nos trajeron comida, nos invitaron a comer, nos acercaron con el auto, Chichita subió a hacerle compañía a María, que quedo sola y enferma en cama con 40° (nosotros trabajando) - ¡¡¡que más!!! - ¡¡siempre al servicio y con un cariño paternal que conmueve!!
