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domingo, abril 12

FELIZ PASCUA!!! Comunidad misionera Sta. María del Encuentro.

La Comunidad Misionera de "SOLEDAD MARIANA" 
envió un mensaje vía whats app y Facebook a los pobladores del Paraje "Río Villegas"
y también con este video queremos ABRAZAR A TODA NUESTRA FAMILIA DE SM
y desearles unas MUY FELICES PASCUAS!!! 

"... queremos abrazarte, y junto a vos llenarnos de Jesús Resucitado!!! Cristo en ti, Cristo en mi, Cristo en todos!!!! hacer llegar todo nuestro cariño, cercanía  y abrazo Pascual a las familias de Rio Villegas

Por eso te regalamos este video que armamos. 



HACER CLIC en el LINK de abajo para ver el VIDEO
Saludo de Pascua - Comunidad misionera



domingo, abril 5

Un Domingo de Ramos

En un Domingo de Ramos, en 1983, celebrábamos con Fernando nuestra primera Misa.



Fue hace 37 años, en la capilla de Luján, en Moreno.

Recuerdo que nuestros lemas sacerdotales estaban escritos en unas cartulinas muy lindas en la capilla. El de Fernando “Fijos los ojos en Jesús, para hacer Señor tu voluntad” estaba sobre el Sagrario. Y el mío “Todo tuyo” sobre la Virgen de Luján.

¡Fueron momentos inolvidables!

Junto a Jesús que entraba humilde y pacífico a Jerusalén, comenzaba nuestro sacerdocio en este querido barrio de Moreno.

La Misa la presidió Monseñor Galán, Obispo auxiliar de Morón. En ese entonces la Diócesis era una: los partidos de Morón, Merlo y Moreno.

Estaban presentes nuestras familias y amigos. Y los feligreses de los barrios de Moreno, nuestros nuevos amigos.

Fue una fiesta. Recuerdo que había un cartel grande arriba del altar. El altar estaba afuera y la Misa era a campo abierto. El cartel decía “Vengan a Mí los que tengan hambre…”. Resulta que cerca había una parrilla donde estaban haciendo el asado para todos. Y algunos me comentaban después, que el olor al rico asado les hacía pensar que se acabe pronto la Misa, ¡tenían hambre!

Monseñor Galán habló de nuestros lemas sacerdotales, estuvo muy lindo todo lo que dijo y su humilde presencia.

Después hablamos Fernando y yo dando gracias por el sacerdocio.
Hoy recuerdo y celebro esta fiesta.

Esto es fuerza para este tiempo de prueba que estamos viviendo como humanidad.

Dice el libro de Nehemías que la alegría de Dios es nuestra fortaleza.

Vivamos la alegría de la oración y de la solidaridad.

Vivamos la alegría de la esperanza en medio de los tiempos difíciles.

Como hemos aprendido, todo terminará bien.

Y como nos dio testimonio Fernando viviendo su lema sacerdotal, todo terminó bien en su vida, hasta el abrazo final con Jesús Resucitado.

Con estos sentimientos, le deseo a toda Soledad Mariana anticipadamente, una feliz Pascua de Resurrección.

Martín
5-4-2020

jueves, abril 2

Fijos los ojos en Jesús…


“Fijos los ojos en Jesús, para hacer Señor tu voluntad” 
(Hebreos 12,2; 10,7).

Este fue el lema sacerdotal de Fernando que lo iba a llevar a aquel otro de su ser Obispo que decía “Cristo es nuestra paz” (Efesios 2,14).

Aquí podemos ver entonces como un camino espiritual recorrido por él.

El hacer día a día la Voluntad de Dios lo llevó a la plenitud del Orden Sagrado que es el servicio episcopal.

Les decía en unas líneas que les compartí antes, que me es muy difícil escribir sobre Fernando, porque son tantas las cosas, que se me agolpan todas juntas. Entonces pensé en escribir esta vez en lo más importante, en el secreto de su fuerza.

Creo que ese secreto fue su amor al Señor Jesús. Este era un amor íntimo, muy personal.

Alguna vez me contó de una experiencia espiritual que lo marcó para toda su vida. Esta experiencia fue en el año 1975. Al año siguiente iba a comenzar el camino de su vocación.

Como bien sabemos, Fernando era muy reservado con sus cosas, asique le pido permiso para hablar de estas cosas ahora que él está plenamente con el Señor.

Esa experiencia espiritual que tuvo, creo que fue con el Señor Jesús. Lo que sí sé con seguridad, es que fue una experiencia de mucha luz.

Esta relación íntima con Jesús fue su secreto, según mi punto    de vista.

Siempre tenía sus encuentros con Jesús. Cada mañana los tenía. Lo recuerdo en su cuarto, en su escritorio, con una pequeña vela y enfrente alguna imagen muy linda del Señor.

Así lo recuerdo, también con la Biblia abierta.

Otra imagen que me viene ahora, fue en sus últimos meses de vida, cuando estaba enfermo. Un día entré a su escritorio sin avisar, y lo encontré frente a su mesa de trabajo, con una cruz enfrente de él sobre la mesa, y él la miraba como quien está leyendo un libro, ¡estaba leyendo en el libro de la Vida!

Quería decir esto, este secreto de la vida de Fernando.

Todo lo que vimos de fecundidad en su vida, todo lo que él dio en su entrega por la evangelización, nacía de aquí, de esta intimidad.

Creo que este fue el secreto que lo acompañó hasta configurarse plenamente con Jesús, el Resucitado.

Otro abrazo, 
Martín.
1-4-2020

miércoles, abril 1

Comunidad orante

Hola familia

Nos hemos enterado de la pascua de Isabel López Ontivero, ocurrida el 24 de marzo, vísperas de la Anunciación.

Isa participó de la comunidad SM de Región Oeste durante muchos años, compartimos la Escuela San José, de la que fue coordinadora durante un período y también integró la escuela Juan Bernardino y distintos grupos de oración. Su casa y su corazón siempre han estado abiertos para todos nosotros, realizando allí pilas de reuniones.

Damos gracias por haber sido enriquecidos con su sabiduría y su amistad; su amor entrañable por la vida trapense; la oración; el silencio y la espiritualidad mariana y contemplativa.

Querida Isa, sos una estrella más que tenemos en el cielo, intercede por nosotros. Estarás disfrutando el Encuentro con Aquel al que siempre buscaste y del abrazo estrecho con Lili, la admirada hermana Lía y tu familia más cercana.

Permanezcamos muy unidos en este tiempo de cuaresma universal, orando y animándonos en la esperanza de saber que todo terminará bien!!!!

Con cariño
Killy

Recuerdos de Fernando (1-4-2020)


Muchas veces trato de escribir algo sobre Fernando y me es imposible. Después pienso, bueno voy a decir algo nomás, no hay que decir todo de una vez. Y así ando con el tema.

Por eso, quiero escribir estas líneas como algo nomás de tantas cosas, de toda una vida de amistad.

En 1980 cuando llegamos como seminaristas a la Diócesis de Morón, íbamos los fines de semana a hacer nuestros primeros pasos de vida pastoral a Moreno. Cada seminarista hacía esta experiencia en distintas parroquias.

Este fue el comienzo. Luego seguimos como sacerdotes en Moreno, en la parroquia “San José” en la Perlita, cerca de la casa de Adrián Gauna, que lo conocemos ¡desde niño!

Luego que pasó el tiempo, en el año 1995 me fui a Villa Tesei, y luego a Ituzaingó. Pero Fernando se quedó siempre en Moreno y también muchos años en una parroquia muy pobre de Merlo.
Esto fue así hasta el último año de su vida cuando fue nombrado Obispo de la Diócesis de Salto, Uruguay.

En el tiempo de seminaristas en Moreno, y luego nuestros años de sacerdocio allí, fue pienso, donde nos hicimos verdaderamente sacerdotes. Junto a la gente, gracias a una gran amistad que se iba haciendo día a día con ellos. Recuerdo que yo pensaba que estar en Moreno era una fiesta, y esto sin olvidar el sufrimiento o la pobreza de muchos, pero era una fiesta interior, de la amistad.

Esto nos unía mucho con Fernando. Así crecía nuestra comunidad sacerdotal de Soledad Mariana que llamábamos “San José”.
Cada uno vivía esta experiencia sacerdotal a su modo, con el don de cada uno. Esta diversidad nos enriquecía mucho, así fue siempre.

Una anécdota: recuerdo que semanalmente nos reuníamos los dos a hacer diálogo espiritual. Prendíamos una vela, leíamos la Palabra del día, hacíamos oración. Luego cada uno compartía lo que estaba viviendo interiormente. Esto siempre nos enriqueció mucho.

La anécdota es que al pasar el tiempo, los años, estos diálogos llegaron a ser iguales, pero con distintas formas. Desde hace muchos años nuestros encuentros eran en restaurantes ¡compartiendo una rica comida!

Una vez, unos sacerdotes jóvenes me preguntaban con intriga si alguna vez nos habíamos peleado con Fernando, o discutido. Y yo les dije que sí, en los 42 años de comunidad sacerdotal, recuerdo tres discusiones entre nosotros. Siempre fueron sobre quien se ocupaba de ciertas responsabilidades pastorales, o sea, en la distribución de nuestros trabajos. No recuerdo otras discusiones ni en nuestra comunidad ni en nuestra amistad de tantos años.

Vuelvo a los años en los barrios de Moreno. Todo lo que vivimos allí y luego en otros barrios también, nos unió con Fernando de una manera muy fuerte.

Cuando Fernando fue nombrado Obispo de Salto yo estaba feliz, porque sabía de su felicidad. Y él llevó a Uruguay la misma espiritualidad que vivía en los barrios, la misma pasión por el Evangelio. Y eso fue lo que les asombró allá y llegaba tanto a la gente y a las sacerdotes y obispos.

Como ven, este es solo un trozo de nuestra historia, que es la historia de Soledad Mariana, ya que cada paso que dábamos lo hacíamos como miembros del Movimiento.

Ya les seguiré compartiendo otros recuerdos con Fernando.

Un abrazo grande, Martín.

Movimiento Soledad Mariana

"Soledad Mariana" es un Movimiento de espiritualidad mariana y contemplativa, fundado en la Argentina en 1973, por el monje trapense Bernardo Olivera, actual Abad del Monasterio Nuestra Señora de los Ángeles de Azul, provincia de Buenos Aires.