Quiero expresar las gracias a todos ustedes por haberme dado la oportunidad de servir al Señor desde el lugar de Coordinadora General. Para mí ha sido una gracia muy especial que agradezco profundamente al Señor, porque mucho amo a este Movimiento que nos ha dado Bernardo.
Agradezco la enorme disponibilidad de todos para colaborar y ayudarme en esta entrega. Siempre durante estos tres años hubo un corazón solidario para aclarar, orientar, suplir y aconsejar, y muchas, muchísimas manos para colaborar desinteresadamente, todo esto lo valoro enormemente y ha hecho las cosas mucho más fáciles para mí. ¡Nuevamente Gracias!
Creo también que queda comprobado que la distancia no es un impedimento en esta gestión, mi experiencia en estos años me lo ha demostrado. Igualmente hay cosas en las que podemos crecer, ya sabemos: se va haciendo camino al andar...
También pido perdón a todos, como el publicano en el templo, si he faltado u ofendido a alguien, sepan que no fue mi intención y les doy mis más sinceras disculpas.
Aprovecho para hacer un último pedido, es mi manera de honrar a María Nougués que hace 10 años nos representa formalmente y que tanto ha trabajado por el Movimiento: la Iglesia argentina, nos convoca a través del Departamento de Laicos a participar de un Congreso el 7 y 8 de noviembre.
En nuestro Encuentro General, ahondamos nuestro ser y nuestra identidad como Movimiento y las fortalezas que tenemos para poder cumplir con nuestra misión. Esta es una oportunidad para insertarnos en comunión con nuestra Iglesia y estar presentes como lo que somos: marianos y contemplativos al servicio de todos.
Sería importante que estemos presentes, aunque sea durante la misa de cierre del evento el domingo 8 a las 12 hs. Estamos invitados a participar del grupo que se ocupará de los cantos durante la ceremonia. Una de nuestras fortalezas en Soledad Mariana es nuestra oración y alabanza a través del canto, compartámosla con toda la Iglesia.
¡Ojalá nos hagamos presentes!
¡Ojalá nos hagamos presentes!
El Espíritu Santo sopló y por lo tanto nos pone a todos en muy buenas manos, no dudo Patricia podrá cumplir con esta tarea de forma muy efectiva, hoy y ahora es su tiempo y le deseo lo mejor en su coordinación. Seguiremos trabajando juntas durante los próximos tres meses, ella cuenta con mi colaboración total en esta época de transición y por siempre.
Los abrazo con mucho cariño a todos y cada uno bajo el manto de María de Guadalupe.
Andrea Beccar Varela