Queridos todos:
Ya no falta nada para el festejo salteño más importante para los creyentes: Renovar el pacto de fidelidad con el Señor y la Virgen del Milagro.
Vemos a los peregrinos y su Fe nos traspasa el corazón. Días caminando para llegar al encuentro con sus patronos.
Yo siempre digo que Salta tiene tres momentos de reconciliación y fiesta: Cuaresma y Pascua, el Milagro y Adviento y Navidad.
Momento de reconciliación con Dios, momento de limpiar nuestras almas, como dice el Papa Francisco, saliendo fortalecidos para dar testimonio en el mundo, testimonio de esperanza con alegría y gozo, más allá de los dolores, contratiempos y pérdida que podamos sufrir. Todos nosotros tenemos una fuerza especial que nos sostiene, Somos el Cuerpo de Cristo, pero la Iglesia no es solamente humana, el Espíritu Santo da la fortaleza y la guía, la sostiene.
Nosotros tenemos que mostrar esto, no hablando demasiado, sino con nuestros actos.en paz, tranquilidad y muchas veces en silencio. Francisco hace poco decía que Dios hace así las cosas.
Recuerdo en un retiro en La Caldera, hace un montón de años, que el entonces P. Fernando, hoy obispo de Salto, decía que las cosas de Dios son en silencio y tranquilas, apacibles, si hay mucho ruido, no es de Dios.
Que vivan un feliz Milagro, Y que esa alegría se transmita en nuestros mensajes.Lucy Beltrame