Muy Queridos hermanos:
Les comparto, a continuación, estas dos comunicaciones desde Japón, de parte de un sacerdote jesuita japonés, asesor ecesiástico del movimiento CVX (Comunidades de Vida Cristiana).
Sé que sobran palabras y, que verdaderamente Gracias a Dios, podemos ayudarlos y acompañar a nuestros hermanos de Japón con nuestra salud orante, con nuestra entrega pequeña y desapercibida, con un deseo de comunión de corazón a corazón por aquel que más lo necesite...
Que la gracia de la vida contemplativa nos enseñe la solidaria soledad de María para poder encontrar cada uno, la manera de unirse a nuestros hermanos de Japón.
un fraterno abrazo a cada uno, unidos en oración mariana por ellos
María
1ºComunicación 15/3/2011
Queridos amigos CVX:
En mi casa de retiro, todas las actividades (retiros y talleres) fueron canceladas porque el sistema de
transporte público no se ha estabilizado. Mucha gente no puede venir e irse a casa. Mañana planeamos
realizar un día de retiro. No sé cuántos pueden venir, pero queremos reunirnos a orar juntos para que se
detenga el desastre.
20.000 personas continúan desaparecidas. 450.000 personas se han visto obligadas a vivir en un refugio.
Ellos lo han perdido todo, casa, granja, empresa, carro, etc. Muchos pueblos y ciudades a lo largo de la
costa desaparecieron completamente por el gran Tsunami.
La contaminación radioactiva se va haciendo más pronunciada. Mucha gente está realmente asustada. Es
difícil conseguir comida (pan y leche), gasolina y electricidad. Un sistema de logística complicada no
funciona bien ahora.
Al ver las escenas del desastre del Tsunami en TV, entendí la situación real de este pasaje: "el que esté en el
manto" (Mt 24, 17-18). Es verdad que quien se refugió en el techo del edificio se salvó, pero quien regreso
a su casa por una cosa que dejó fue tragado por la gran ola. Y Mateo 24, 38-41 cuenta una situación similar.
Siento que la situación de desastre es realmente apocalíptica. He meditado en Mt 24 y le pido perdón a
Dios y que detenga esta destrucción.
Este año hemos tenido muchos desastres naturales, inundaciones en Pakistán y Australia, terremoto en
Nueva Zelanda, etc. Creo que tenemos que considerar una reconciliación con la naturaleza más seriamente.
Toda la gente, especialmente en el primer mundo necesitan arrepentirse y cambiar nuestro estilo de vida.
Eichan Hanafusa, s.j.
AE de CVX Japón
2ºComunicación 17/3/2011
Queridos amigos en el Señor,
Realmente aprecio su preocupación y oraciones. A pesar que la presente situación todavía es tensa e impredecible, muchos damnificados están muy calmados y mucha gente tratando de ayudar con todas sus fuerzas. Puedo ver muchos lados positivos de la humanidad. Me ha dado consolación.
Les he pedido a muchos miembros CVX y amigos católicos que oremos juntos. Comenzaremos una novena hoy. Si están interesados, por favor únanse a nosotros.
Novena de oración del 17 de marzo (el día conmemorativo del descubrimiento de
los católicos japoneses en Nagasaki) al 25 (la fiesta de la Anunciación y el Día Mundial de la CVX).
3 intenciones:
1. Las victimas (550.000 personas) para que puedan obtener el apoyo suficiente.
2. Las personas fallecidas (son más de 5.000, se ha ido incrementando día a día) para que puedan tener paz eterna en el cielo.
3. La fuga radioactiva para que se detenga lo más pronto posible.
Los contenidos de la oración son libres: Rosario, Estaciones de la Cruz, Meditación, cualquier cosa que puedan hacer.
Imagino que cientos de católicos se unirán a la oración de esta Novena. Por favor únanse a nosotros. Incluso solo un día o dos días está bien.
Permítanme explicar acerca del día conmemorativo de hoy. Es un día muy especial para los cristianos japonés. Hace casi 400 años el gobierno japonés perseguía muy severamente a los católicos japoneses y se estima que 200.000 católicos fueron martirizados de forma heroica. Pensaron que todos los cristianos se habrían terminado para ese momento pero muy estrictamente continuaron prohibiendo el cristianismo. Después que el antiguo gobierno se arruinó y un gobierno nuevo y moderno que comenzó hace unos 150 años, muchos extranjeros vinieron a Japón. Un sacerdote católico vino con el fin de cuidar de ellos. Cuando oraba en la capilla el 17 de marzo, varios agricultores japoneses entraron a la capilla. Le hicieron 3 preguntas al sacerdote, "¿Usted venera a la Santísima Virgen, Nuestra Madre?, ¿Usted respeta al Papa como líder de nuestra iglesia?, ¿Es usted soltero?". El respondió "Si". Entonces ellos dijeron "Usted y nosotros tenemos el mismo corazón". De repente aparecieron cristianos japoneses.
Fue una gran sorpresa que ellos mantuvieron su fe completamente en secreto una generación tras otra por 250 años. Sin un sacerdote y la Sagrada Eucaristía bautizaron sus hijos, expresaban oraciones católicas, celebraban navidad y la Pascua cada año. Ellos pudieron sobrevivir como un grupo a pesar de la severa supresión del gobierno. Ese sacerdote pensó que este es uno de los Santos milagros en la Iglesia Católica. Esta es la razón por la que los japoneses celebramos hoy ese milagro.
Si! Los japoneses nunca nos rendimos ante ninguna dificultad.
+ Dios, Padre Nuestro, Tú eres el verdadero gobernante de este Mundo. Alabamos tu Santo Nombre. Por favor, ten compasión del pobre pueblo en Japón que sufre a causa del Terremoto, Tsunami, y la contaminación radioactiva. Señor ten piedad de nosotros. Por favor danos paz, esperanza y ánimo para superar estas dificultades. Confiamos totalmente en Ti, a pesar de que somos pecadores no dejamos de confiar en Ti, Tú eres el único refugio y seguridad. Por favor danos ánimo y fortaleza y especialmente a quienes directamente están en labores de rescate y ayuda. Creemos que nos puedes ayudar. En el nombre del Señor. Amén.
Ei-chan R. Hanafusa, s.j.
A.E. de la CVX Japón