VIERNES 22
Dia séptimo (Se pide don de Temor de Dios)
El temor considera la gran diferencia que hay entre la santidad divina y la fragilidad humana, a nada debemos tener temor, sino al pecado que nos quita la amistad con Dios, nos dice el señor “No tengáis miedo a los que matan al cuerpo pero no pueden matar el alma, temed mas bien al que puede enviar el alma y el cuerpo al infierno” (Mt. 10, 26-28). El temor a Dios debe ser temor filial, que es el temor de ofender a Dios por ser el tan bueno. El Don de sabiduría y entendimiento le descubren la grandeza de Dios y el significado del pecado, el Don de consejo le mantiene en la admiración de Dios, el de fortaleza le mantiene en la lucha contra el mal.
Oración: Espíritu Santo concédeme el Don de temor de Dios, para que bajo su influencia y poder consiga una gran docilidad reverencial a la voluntad divina, haz que este temor a la justicia de Dios sea en mi un temor reverencial, como el que tiene hijos a sus padres, que tenga miedo de ofenderle, tú sabes bien Espíritu Santo que yo necesito este Don para ser profundamente humilde, puro y modesto ante la grandeza de Dios y ante la debilidad de mis propias fuerzas, para practicar el bien. Pon en mi corazón un gran horror al pecado y una diligente vigilancia para evitar hasta las mas mínimas ocasiones de ofender al Señor. Amen.
Para rezar con el corazón: ”Pero yo os digo la verdad os conviene que yo me vaya porque si no me voy, no vendrá a vosotros el Paráclito pero si me voy os lo enviaré. (Jn. 16,7).