UNA ¡GRAN ALEGRÍA PARA NUESTRO MOVIMIENTO!
Durante la última misa que celebramos en nuestro gran Encuentro de Familia en Soledad Mariana, tuvimos la inmensa Alegría de recibir el testimonio de tres personas que hicieron su Alianza Para Cristo. Aquí nos la comparten para los que no pudieron estar presentes.
De Teresa Terrero de Región San Isidro
María Guadalupana, mi Morenita:
Al pie de la Cruz tu Hijo Jesús, te donó a nosotros como Madre.
Así te sentí, cuando me diste tu mano y juntas hicimos este camino.
Me protegiste a mí y a mi familia.
Me cuidaste. Aumentaste mi Fe y me enseñaste a ver con los ojos de tu Corazón.
Madre mía Solidaria y Reconciliadora, hoy estoy frente a Vos haciendo mi tercera Alianza.
Morenita Guadalupana, te pido que sigamos siendo Una,
Vos para mí y yo para Vos. Amén
Teresa
25/8/2013
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De Silvia Ramat de Región Oeste
María Madre
hoy vengo a Ti, a consagrarme a tu dulcísimo corazón y a través de Ti,
llegar a tu divino Hijo Jesús,
para que Él habite en mí y pueda ser instrumento de su palabra,
para darla a quienes no te conocen.
Madre quiero ser totalmente tuya y poder ser fiel a Vos.
Te doy gracias por todo lo que me has dado en mi vida,
especialmente este movimiento del cual tanto he aprendido
y espero llevarlo a los demás con fe, esperanza y caridad.
Amén
Silvia
25/8/2013
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De Alejandro Páez de Región Neuquén
Yo Alejandro me entrego a Ti, querida Madre Guadalupana,
para que de tu mano me conduzcas a tu Hijo Jesús, Nuestro Señor.
Te entrego también a tu cuidado a mi familia, mi esposa María Teresa, mis hijas María Pía, María Luján y María Josefina, a mi padre Osvaldo, a mis hermanos y a mis amigos.
Ayúdame Madre a tomar mi cruz y seguir a Cristo,
a imitarlo para que pueda ser un esposo fiel, padre generoso
y puro corazón como tu esposo José a quien reconozco como mi padre y modelo.
Ayúdame Madre a poder ver con los ojos de tu Hijo para así tener un corazón solidario,
dispuesto a perdonar, a consolar y obrar la paz.
Un corazón agradecido por los dones recibidos al servicio de mis hermanos,
especialmente aquellos que están transitando los últimos momentos de su vida.
También al servicio de la Iglesia y del movimiento Soledad Mariana.
Todo esto en el Espíritu Santo por Jesús Nuestro Señor hacia el Padre que nos espera.
Alejandro
25/8/2013