Para este espacio les habíamos propuesto previamente la lectura del un fragmento del documento del CEA, Misericordiosos como el Padre. Reflexiones y sugerencias para preparar y vivir el Jubileo de la Misericordia del capítulo: Las obras misericordiosas desde Cáritas.
Les presento un punteo de las ideas centrales a fin de aportar elementos para el tiempo de regiones que sigue a continuación.
En el día de ayer hemos rezado en grupo, diferentes parábolas de la Misericordia (Lc. 15) La Sagrada Escritura nos ofrece un extenso testimonio que nos mueve a proclamar con admiración y alabanza que "Dios es rico en misericordia" (Ef 2.4) La Palabra de Dios, su obra son camino en el Amor y dando amor permanecemos en el Amor. En palabras del a homilía de Pascua del Papa…dando luz somos luz.
Rezamos estas parábolas en oración representada. Y es justamente en la Ejercitación Oración Representada dónde Bernardo nos recuerda el poder sacramental de las obras de Jesucristo. Deseo que la contemplación de los hechos de la vida del Señor, obre en nosotros los mismos efectos que habría obrado si hubiéramos estado en aquella circunstancia histórica. Dice Bernardo que Cristo Resucitado eterniza los hechos históricos de su vida pasada.
Es desde esa contemplación que hoy queremos escuchar y responder al llamado que nos hace el Papa: abrir el corazón a las periferias, curar las heridas… siendo iglesia hospital de campaña.
Todos tenemos heridas, todos estamos heridos de amor... como el título de un poema de García Lorca que describe el dolor de un herido de amor huido.
Pero creo que nosotros estamos más bien heridos de un amor que tontamente algunas veces expulsamos o que desoímos…
El documento afirma que "La sabiduría popular refleja esta conciencia de contraste: mientras Dios es infinitamente rico en misericordia, los hombres somos mezquinos para misericordiar a los que nos rodean. Como lo revelan los libros sapienciales, el Pueblo de Dios es consciente que -el hombre sólo tiene misericordia de su prójimo, pero el Señor es misericordioso con todos los vivientes- (Eclo 18,13)"
Somos sanadores heridos
A la vez experienciamos que somos sanadores sanados, sanadores hijos predilectos como ayer nos testimoniaba Tere Páez.
Somos sanadores agraciados.
Sanadores sanados por el único médico, sanador, salvador.
La charla de Federico también vino en esta línea tomando como fuente el Salmo 50. El Padre con su palabra, con sus gestos y con toda su persona... nos mueve a contemplar La admirable misericordia de Dios por nosotros y nos mueve a dejamos transformar por Él y a manifestar en nuestra vida la misericordia con todos los que nos rodean...
En este documento los obispos nos invitan a ser misioneros de la misericordia. Sandores que mientras nos vamos ejercitando, vamos caminando, nos vamos convirtiendo….somos instrumentos si nos dejamos hacer por María. Por eso vivimos Aliados al Padre en María.
El Señor nos sana mientras curamos a otros, mientras cuidamos de la vida del otro…
Y María Madre promueve en nosotros el deseo de curarnos unos a otros.
Me pregunto como podemos curar nosotros desde nuestro carisma…
Acogiendo, acompañando, escuchando, ejercitando, evangelizando, misionando…
Francisco desde en este año santo despertar en nosotros mayor conciencia del dolor y necesidades. Nos llama a la vez a contemplar las muchas heridas y nos impulsa a actuar.
Somos un Movimiento contemplativo por Gracia de Dios. Desde esta mirada contemplativa podremos poner al herido en el lugar de Jesús y superar un - hacer - más vinculado a la justicia social, que es algo bueno por supuesto, por un –sentir- . Por un ser misericordiosos.
Propusimos ayer la oración con las parábolas de la Misericordia para mirarnos en ese espejo. El espejo de las obras de Jesús.
La tradición cristina especifica, diferencia dos tipos de obras de misericordia que detalla de la siguiente manera:
Obras de misericordia espirituales
Enseñar al que no sabe.
Dar buen consejo al que lo necesita.
Corregir al que yerra.
Perdonar las injurias.
Consolar al triste.
Sufrir con paciencia los defectos del prójimo.
Rogar a Dios por los vivos y difuntos.
Obras de misericordia corporales
Visitar y cuidar a los enfermos.
Dar de comer al hambriento.
Dar de beber al sediento.
Dar posada al peregrino.
Vestir al desnudo.
Visitar a los presos.
Enterrar a los muertos
San Benito las llama instrumento del obrar. El documento que les propusimos leer tiene varias preguntas que pueden orientar el trabajo en regiones y decidir cual de ellas queremos abordar de manera comunitaria.
Hay muchas formas de pobreza, la pobreza física – económica; la pobreza cultural; la pobreza relacional y la pobreza espiritual. A pluridimensionalidad de situaciones de pobreza le corresponden multiplicidad de respuestas y estoy segura que cada comunidad encontrará un camino.
Otra intención del Papa es introducirnos en el misterio de la Misericordia… preguntándonos qué es la Misericordia. A la etimología de la palabra la conocemos… pero ¿Qué significa para cada uno y para nuestra comunidad… y cómo vivirla?
En lo personal intuyo que es una año especial para el crecimiento en el amor. Ser misericordiosos puede significar abrazar y contener al otro, pero también ser misericordiosos puede significar exhortar, poner un límite.
Recuerdo el primer Retiro de ejercitadores al que fui en el año 90, en la casa de Nazaret. Antes eran retiros. Allí Bernardo habló de un Dios que es padre y madre. Y nos enseño que para ordenar nuestro amor desordenado deberíamos crecer en amor materno y paterno. En mi caso, la sobre protección materna que me sale por defecto, naturalmente, crecería en un amor más sano si desarrollara aspectos del amor paterno más vinculados a la imposición de la ley....y eso es bastante complejo por mis límites ... pero necesario para el servicio que asumí en esta comunidad. Eso es lo que estoy ejercitando con todas las herramientas que conozco (diálogo espiritual, oración, terapia y ejercicio)
Desde diferentes materiales que han llegado a mis manos (Carmelitas, libro de Kasper, etc.) arme esta ejercitación con estas preguntas y disparadores que invito a rezar….
¿Cómo ha sido tu experiencia de la misericordia de Dios?
¿Tengo "esperanza ciega" en la infinita misericordia de Dios para mí?
¿Hay alguna instancia particular que recuerdes?
Demos gracias a Dios por su abrazo lleno de perdón.
¿Hay alguna situación que tengas que entregar al amor misericordioso de Dios?
¿Quiénes fueron misericordiosos con vos?
¿Qué miradas de amor han dignificado tu vida?
Demos gracias por su testimonio….
¿A qué personas dignificás vos con tu mirada?
¿Qué personas aún están en espera de esta mirada tuya?
¿En qué cosas o con qué personas tendría que adelantarme e ir a su encuentro?
¿Qué ocasiones puedo aprovechar y convidar la buena noticia y la alegría de la misericordia? (Familia, trabajo, amigos, etc...)
Cariños guadalupanos
Killy Romero